Daniel Canogar se inició en la fotografía a temprana edad, pero pronto emprendió una búsqueda de posibles alteraciones de sus formatos tradicionales que le llevó a una práctica más bien escultórica. Con el tiempo las instalaciones de Daniel Canogar han ido aumentando en dimensión y complejidad, sobre todo desde la incorporación de fibra óptica. En 2008 empieza a trabajar con todo tipo de materiales desechados. Así en Tangle o Palimpsesto utiliza cables y bombillas encontrados en basureros. Para Daniel Canogar estos objetos son símbolos no solo de la sociedad de consumo, sino también del ciclo de vida, un ciclo cada vez más corto en lo que a muchas de las “nuevas” tecnologías se refiere.
La voraz sociedad de consumo, así como nuestra relación con el medio ambiente son temas que subyacen en toda la obra de Canogar y de las que surgen nuevas preocupaciones. En 2010 empieza a rendir homenaje a las tecnologías de archivo obsoletas, cuya desaparición implica el peligro de pérdida de memoria y de identidad, tema todavía muy presente como hemos visto en su última exposición en Alcalá 31 con la espectacular obra Sikka Ingentium, un mural de 2.400 DVDs sobre el que se proyecta su propio contenido, otorgando un nuevo uso a estos materiales ya prácticamente en desuso.
Las pantallas como el material arquitectónico de las ciudades del futuro emitiendo constante información y nuestra total dependencia de ellas, es la visión que Canogar nos ofrece con sus piezas más recientes. Datos e imágenes producto de complejos algoritmos recorren silenciosamente las pantallas hipnotizando nuestra atención. Pero a pesar de la inquietante visión distópica que recorre su obra, en muchas de sus intervenciones públicas Canogar implica al público, gesto con el que otorga a la colectividad el poder de defender nuestra condición humana, simbolizada a través del sentir y la expresión del cuerpo.
Daniel Canogar recibió un master con especialización en fotografía de la New York University y el International Center for Photography en 1990. Ha realizado diversos trabajos en espacios públicos, entre los que destacan Waves instalado permanentemente en el atrio del Houston Center en Houston; Travesías, realizado para el atrio del Consejo de la Unión Europea en Bruselas y Constelaciones, el mosaico fotográfico más grande de Europa en el Parque Madrid Río. Entre sus últimos proyectos destaca Storming Times Square, una intervención de vídeo en 47 de las pantallas de Times Square. Sus trabajos se han expuesto en el Museo Nacional Centro de Arte Reina Sofia, el Palacio de Velázquez, Madrid; Museo de Historia Natural, Nueva York; Museo Andy Warhol y Mattress Factory Museum, Pittsburgh, entre otros.